JESUCRISTO ES EL MEJOR REGALO DE LA NAVIDAD
JESUCRISTO ES EL MEJOR REGALO DE LA NAVIDAD

JESUCRISTO ES EL MEJOR REGALO DE LA NAVIDAD

¡Jesús es un regalo que se nos es dado gratuitamente!

Aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo, por gracia sois salvos.
Efesios 2:4–5.

Dios nos regaló la salvación gratuitamente a través de Jesús

La Biblia nos dice que Dios en su amor hacia nosotros nos regaló la salvación eterna gratuitamente a través de Cristo Jesús. Jesús nació en un pesebre, murió por nuestros pecados derramando su sangre en la cruz para pagar por nuestras deudas y resucitó al tercer día dándonos vida eterna.

 siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús

(Romanos 3:24)

Jesús es un regalo necesario.

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

(Juan 3:16)

Jesús es un regalo perfecto.

Y sabéis que él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él.

(1 Juan 3:5)

Jesús es un regalo que tengo la libertad de recibir o desechar.

He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.

(Apocalipsis 3:20)

Jesús es un regalo que no puedo perder y nadie puede robarme.

¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada? Como está escrito:
Por causa de ti somos muertos todo el tiempo;
Somos contados como ovejas de matadero.
Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

(Romanos 8:33–39)

Si todavía no has aceptado a Jesús como el Señor y Salvador de tu vida y ese es tu deseo, puede hacerlo orando así
Padre celestial, reconozco y confieso que soy pecador y me arrepiento de todos mis pecados. Te agradezco por amarme así tal cual soy yo; creo en tu hijo Jesús quien murió en la cruz por todos mis pecados y quien resucitó al tercer día para darme vida eterna. Señor Jesús confieso con mis labios y con mi corazón que creo en ti y te acepto como mi Salvador y mi Señor. Haz de mí la persona que tú quieras. Toma control absoluto de todas mis acciones. Gracias por la salvación y la vida eterna que me regalas. En el nombre del Señor Jesús. Amén.

Ahora congrégate en una iglesia de sana doctrina (Hebreos 10:25)

  • Busca una iglesia de sana doctrina bíblica donde se predique el evangelio de Jesucristo.
  • Una iglesia donde NO se haga de la fe un negocio.
  • Una iglesia sana (No hay iglesia perfecta) donde puedas conocer a Dios y a Su Palabra más profundamente.
  • Una iglesia donde puedas vivir en la libertad que te dio Cristo.